Con el buen tiempo y la época de vacaciones nuestro ritmo de vida cambia, son más frecuentes las comidas que realizamos fuera de casa, y nos resulta más difícil controlar las cantidades y el tipo de preparación de los alimentos. Por otro lado las altas temperaturas nos invitan a prescindir de los “platos de cuchara” y a caer más en pequeñas tentaciones como son los helados, cervezas, pescadito frito… y demás placeres culinarios. Como consecuencia volvemos de las vacaciones con algunos kilos de más. Todo el esfuerzo que hemos estado haciendo durante el invierno, por querer perder peso, se detiene. Así que, si sigues algunas recomendaciones que te haremos, evitaras que la vuelta al trabajo te pese demasiado.

Aprovecha que las temperaturas elevadas te invitan a prescindir de comidas copiosas y contundentes. Seguro que con tanto calor no te apetece un estofado o un cordero asado. Opta por platos ligeros, cocina los alimentos a la plancha o a la brasa y sobre todo, evita los helados y postres dulces.

Apúntate a las ensaladas. Hay muchos alimentos que se pueden tomar con ellas. La solución es eliminar aquello que no nos gusta y añadir los que si nos gustan. Un ejemplo seria, si no nos gusta el pimiento pues lo quitamos, y si nos gusta el queso, pues lo añadimos.

Obtén las ventajas que el calor proporciona. Si tienes sed, bebe agua en abundancia, conseguirás magníficos beneficios, como es el de hidratar y depurar nuestro organismo.

Ya conocemos las virtudes de las frutas, verduras y hortalizas. Son fundamentales para lograr una alimentación sana y equilibrada. Como sabemos su papel en las dietas de adelgazamiento es imprescindible. Hay una gran variedad de frutas, aprovecha su sabor este verano.

Si comes fuera de casa, te resultara más difícil controlar las cantidades y el tipo de alimento. Si bebes cervezas cámbiala por tinto de verano y no olvides el postre, no te pidas un helado opta por fruta del tiempo.

Para pasar los meses de calor sin ganar peso, recordaremos unos consejos básicos eficaces:

  • Usa y “abusa” de frutas, verduras, ensaladas y similares.
  • Carnes y pescados siempre a la plancha o a la brasa.
  • Agua como la mejor bebida.
  • Alcohol de forma moderada. La mejor opción el tinto de verano.
  • Y sí, puedes concederte de vez en cuando un capricho: un helado, una tarta o algún postre que te encante.
  • Sal a pasear o realiza algún deporte de verano, te ayudará a contrarrestar posibles excesos…

¡DISFRUTA SIN PASARTE!

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